¿Has recibido una carta de la DGT? No te alarmes, es informativa
Como ya hablamos en nuestro anterior artículo, este verano viviremos en nuestras carreteras la operación salida más parecida a la de 2019. Esto provoca que la Dirección General de Tráfico esté pendiente ante todas las posibles infracciones de los conductores como, por ejemplo, circular sin la ITV o no haber pagado el impuesto de circulación.
Por ello, estos últimos meses, el organismo ha preparado varias actualizaciones en estos campos. Y, para que todos los usuarios tengan conocimiento de las mismas, se mandarán miles de cartas informativas a los domicilios de los conductores españoles. Pero no tenemos que temer nada, simplemente será un texto con las novedades en términos legislativos que pretenden mejorar la seguridad y tranquilidad en la carretera. Algunos de los cambios que señalará esta misiva son los que vemos a continuación.
Cambios en la ITV
Cualquier vehículo que haya sufrido un siniestro total y sea arreglado deberá pasar por una revisión técnica antes de volver a ponerse en circulación. En caso de no realizarla, se considerará que el vehículo está circulando de manera ilegal.
Otro de los cambios es que, aquellos vehículos que lleven más de 10 años sin acudir a una ITV o sin contratar un seguro obligatorio, podrán ser dados de baja directamente desde la administración sin preguntar al propietario.
Las bajas temporales y advertencias de multas por correo
Como hemos comentado en uno de nuestros artículos, dónde indagamos sobre la nueva normativa de las bajas temporales de los vehículos, éstas tenían el carácter de indefinidas en el tiempo. Se prolongaban hasta que el propietario quisiera y la DGT no podía influir de ninguna forma. Pero esto cambia y quedará limitado a un año como máximo, aunque se podrá ampliar si el usuario lo solicita.
Además, la Dirección General de Tráfico ha alertado de un intento de estafa muy recurrente que puede afectar a los conductores. Se trata de una oleada de correos electrónicos que notifican multas pendientes de pagar. El mensaje no es de la institución, sino un delito de phishing, una fórmula muy extendida en el mundo digital.
Estos defraudadores mandan estos correos masivos usando el logo y la imagen de la DGT con un enlace para realizar el pago, aunque lo que se consigue es descargar un programa malicioso en nuestro ordenador con el que se puede acceder a los datos bancarios.